Cuando compramos un coche nuevo pensamos en la posibilidad de alquilar o comprar un garaje para que éste pueda dormir bajo techo y así no se deteriore con el tiempo. Hay veces, que no compensa ese gasto, pero sí que es verdad que cuando dejamos el coche aparcado en la calle, lo estamos exponiendo a posibles arañazos, robos y deterioros por desgaste gracias a las condiciones meteorológicas. Hoy te vamos a contar cómo se deteriora el coche durmiendo en la calle y ya tú decides si hacerte con un garaje o no.
- El invierno, el frío y la lluvia deterioran nuestro vehículo por dentro. En este caso se ven afectados los líquidos como: Lubricantes, líquido de frenos, o refrigerante. Por eso, si no disponemos de garaje, tenemos dedicar unos cuantos minutos para que la mecánica y estos fluidos alcancen la temperatura óptima de funcionamiento antes de iniciar la marcha. Con el hielo y la lluvia también se deteriora el material del limpiaparabrisas, por lo que deberemos de evitar accionarlo si vemos que la luna está helada. La batería del coche también sufre bastante durante el invierno, por lo que deberemos de comprobar su estado de forma periódica. Su vida será más larga si el coche duerme en garaje. Y, por supuesto, los neumáticos, que notarán en la calle bastante más que en el garaje las variaciones de temperatura.
- El sol y el calor también deterioran mucho el coche si duerme en el exterior. En este caso la carrocería se irá desgastando con el paso del tiempo. Los neumáticos también sufren con el calor y es por eso que habría que revisarlos periódicamente.
- Y por último, al dormir en la calle está expuesto a todo tipo de robos, tanto de algunas de sus piezas u objetos, como al vehículo completo.
Así que si quieres evitar todo esto, no dudes en hacer todo lo posible por que tu coche duerma seguro dentro de un garaje.