Los depósitos de gasoil, sean de particulares o de profesionales, deben pasar unas pruebas rutinarias y periódicas de estanqueidad para garantizar su seguridad y la de todos los que trabajan con los mismos. Estas tareas, así como las de mantenimiento, deben ser realizadas por profesionales que garanticen la máxima seguridad y no pueden dejarse de hacer ya que podría entrar en peligro nuestra seguridad y el propio medio ambiente.
¿Cada cuánto deben hacer las pruebas de estanqueidad?
- Depósitos para consumo en la propia instalación. Este tipo de instalaciones requieren de un periodo más amplio, ya que podrán realizar las pruebas de esntaqueidad cada cinco años pudiéndose realizar con producto y funcionando. Mientras que a los diez años debe pasar otra pero ya con el tanque vacío, desgasificado y limpio.
- Depósitos para suministro a vehículos. Las instalaciones para suministro a vehículos deben realizar la prueba de estanqueidad cada año, pudiéndose realizar con producto en el mismo tanque. Mientras que cada cinco años, se debe hacer la prueba de estanqueidad con el depósito vacío, limpio y desgasificado.
Alternativas a las pruebas periódicas de estanqueidad
- Colocación de sondas de nivel. Este dispositivo informará en tiempo real de las posibles fugas y tendremos tiempo suficiente de actuar con lo que no es necesaria los controles rutinarios más seguidos.
- Transformación de tanques a doble pared. Es la única forma viable de que no se realicen pruebas de estanqueidad ya que los tanques que pasan a tener doble pared garantizan y aseguran que ni contamina ni podrá contaminar nunca.
Cabe recordar que las pruebas de estanqueidad de depósitos son esenciales para garantizar la seguridad y la conservación del medio ambiente, así como de las propias instalaciones. También existe la opción de revestir el tanque con un forrado a base de plásticos reforzados con fibra de vidrio que prolonga su vida útil y lo protege de la corrosión.
